En un mundo que aún se tambalea por el impacto de COVID-19, ¿qué bien preparados que están los negocios para hacer frente a las grandes crisis?
Un mundo siempre cambiante
COVID-19, los incendios forestales australianos, los eventos de seguridad en el Medio Oriente y los desastres naturales que han ocurrido en los últimos seis meses. Esto es parte de una tendencia más amplia con la frecuencia de estos incidentes aumentando, y con cada crisis, el mundo se ve diferente que antes. La conectividad de nuestro planeta también ha aumentado la intensidad de estos eventos, y la actual pandemia ha puesto de relieve nuestra dependencia de las cadenas de suministro mundial, la tecnología y nuestra capacidad para viajar. A pesar de los avances en la informática y la tecnología que nos permiten superar estos incidentes, la debilidad crítica que a menudo pasamos por alto en nuestros planes son las personas.
Ahora más que nunca, las organizaciones necesitan Planes de Resiliencia del Negocio (BRP) efectivos que identifiquen a las personas que son absolutamente esenciales para mantener a una compañía funcionando en las circunstancias más desafiantes. No todas estas personas serán los empleados de mayor rango en lo alto de la organización en los que automáticamente podamos pensar. Podrían ser personas que desempeñan funciones especializadas, que son pensadores críticos inherentes, que no se doblan ante la presión, o que tienen las aptitudes y la mentalidad necesarias para detectar oportunidades en tiempos de adversidad.
Personas críticas y cómo identificarlas
Si bien toda organización necesita comprender los niveles mínimos de personal, a menudo hay una concentración de personal crítico en industrias de alto riesgo y reguladas o en empresas de infraestructura en gran escala, sin lo cual la organización simplemente no puede funcionar. Se trata típicamente de personas dentro de una empresa cuyo trabajo suele ser invisible para los demás, pero que es fundamental para "mantener las ruedas en marcha". Pueden tener obligaciones de reglamentación, desempeñar funciones de apoyo o poseer los conocimientos técnicos necesarios para apoyar a los clientes o asegurar la continuidad de las operaciones.
En las industrias reguladas, las funciones suelen ser nombradas y obvias, debido a las competencias técnicas o a la capacidad de cumplir una obligación exigida por la legislación. Estas personas también pueden ser conocidas como "habilitadores críticos" debido a sus competencias; su experiencia basada en el tiempo; sus calificaciones o su aprobación como habilitadores, que les permiten realizar tareas específicas que nadie más puede realizar.
Por ejemplo, en la aviación podrían ser técnicos de mantenimiento e incluso la tripulación aprobada para cada tipo de avión. En las compañías offshore, este podría ser el gerente de instalación offshore. En el mundo marino, es el maestro y los miembros críticos de la tripulación. En la infraestructura crítica, es la gente que tiene la capacidad de "mantener las luces encendidas" - esto podría ser cualquier número de personal clave que trabaja en los servicios públicos, incluyendo el agua, el gas y la electricidad. Si nos fijamos en los ferrocarriles, podrían ser los conductores y el personal de señalización aprobados para una ruta en particular. Todo esto implica competencias técnicas y puede llevar años de formación y una enorme inversión por parte de la empresa en capacitación especializada para asegurar que las personas puedan realizar el trabajo con el nivel requerido. Sin estas personas, las empresas simplemente no pueden funcionar con eficacia.
En otras organizaciones comerciales no reguladas, las personas críticas pueden ser más difíciles de identificar. Esto podría incluir al personal de back office como tesoreros, secretarios de empresa, interfaces de clientes, gerentes de relaciones, innovadores o aquellos con habilidades organizativas destacadas - estas personas a menudo han ocupado numerosos puestos dentro de una organización y saben cómo hacer las cosas rápidamente, a través de los departamentos.
Para identificar a estas personas, una empresa debe examinar su estrategia y los mercados en los que opera y considerar "¿de qué funciones no podemos prescindir? Esto podría hacerse a través de una evaluación de riesgos que forme parte del BRP de una empresa o de una evaluación del impacto empresarial, o a través de registros legales que formen parte de un sistema de gestión como la norma de salud y seguridad en el trabajo ISO 45001, reconocida internacionalmente, o como parte del desarrollo de una matriz de competencias y autorizaciones esenciales.
